Hace mucho tiempo que quise emprender este viaje, dejar lo malo atrás; miedos, costumbres, constructos, prejuicios, etc. Dedicarme a conocerte en plenitud y compartir de mi esencia para aprender más de la tuya.
En este camino, he tenido muchos obstáculos, luces confusas, señales erroneas, caminos cortados, lugares cíclicos que me hacen pensar que debí haber cargado una brújula para encontrar mi destino.
Cada palabra de aliento pronunciada, me permitía ver más alla de mi comprendimiento y entender que el camino que sigue es aún más difícil. Pero no imposible.
El camino se pavimenta y es menos pedregoso cada vez que sonríes, tu mirada es el complemento del ambiente, llueve cuando lloras, tiembla con tu ira. Tus ojos vuelven el camino fascinante.
Tus labios serios, tus labios mojados. El esquema que traza tus mejillas, que da entender que estas feliz mientras camino hacia a ti.
Mi existencia se resume en ese carmesí, la cavidad carnosa sobre tu mentón. Me acerco a tu boca lentamente y cuando estoy llegando al fin hacia él, me interrumpe el entorno y todo el camino recorrido vuelve a empezar.
Es hora de dejar atras los miedos y volverlo a intentar.
Agnadhi du anghi
No hay comentarios:
Publicar un comentario